En:
Biblioteca Nacional de Cuba. Colección: Morales, No. 279
Pamplona 16
de Enero de 1877
Sr. Hilario
Cisneros
Mi estimado
amigo:
El mes
pasado escribí a Ud. por conducto de un amigo y hoy aprovecho la oportunidad de
la marcha a esa de Raimundo Menocal para volver a hacerlo.
Mi posición
en nada ha variado, de nueve meses a esta parte cada día se invierte [Sic.] alguna
cosa nueva para mortificarme y si puedo escribir es valiéndome de mil medios
para poder entregar las cartas a mi madre[1].
He sabido
que ya mi esposa está en esa y le agradecería a Ud. impida que hiciera cuanto
en sus manos estuviese para que la (...)
de ella no influya en la educación de Calixto. Mi único deseo es que
este sea un hombre útil a la sociedad, sea cual sea la posición que en ella
ocupe y crea Ud. que me preocupará más que mi prisión la idea de que mi hijo
vuelva a cometer las faltas de antes y que según Ud., amigo mío, que ha sido su
verdadero padre, es con quien espero que lo corrija y encamine como podría
hacerlo yo.
Le
recomiendo a Ud. particularmente al portador de esta, Raimundo Menocal, uno de
mis mejores amigos.
Soy de Ud.
Affmo [Afabilísimo] y agradecido amigo
Calixto G.
Iñiguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario