Por: César Hidalgo Torres
Cuando la tropa de Jiguaní sale hacia Bayamo, a unirse a Céspedes, el Gobernador Militar
del pueblo, Calixto García, deja en el puesto a un primo suyo, Manuel Fernández
Iñiguez, y va con los revolucionarios.
Diario de Máximo
Gómez:
Octubre 21 [1896]
[Porque
con excepción de Calixto, nadie le prestaba la más mínima atención dice Gómez
que marchó con ellos] aunque sufriendo,traté de dominar la situación y seguí
detrás sin representar papel alguno. En Santa Rita se hizo noche. Aproveché la
ocasión y logré por medio de Calixto tener una conferencia con Mármol.
En ella le manifesté mi destino y Comisión y como al propio tiempo le
hice comprender que a pesar de mi destino yo deseaba seguir con él como un
compañero, me aceptó.
Ya
rumbo a Bayamo, a participar en la toma de ese pueblo, Donato Mármol nombra a Calixto
García Jefe del Estado Mayor.
Octubre 21 [1896]
Al
siguiente día marchamos para Bayamo. Cerca ya de aquella población le advertí
[a Donato Mármol] el modo como se acostumbraba hacer la entrada las tropas
en una plaza para evitar un desorden, y mucho más, en una plaza que a la sazón se
batía al enemigo en su Cuartel, no le agradó mucho mi advertencia.
Hay
autores que dicen que fue Calixto García quien influyó en Donato Mármol para
que dejara a Máximo Gómez escoger el lugar más apropiado para que la tropa de
jiguaniceros acampara en las inmediaciones de Bayamo.
[Mármol]
me dio facultades para que yo lo ordenara todo; yo respiré de gozo pues ya
principiaba a hacer algo, dispuse entonces que toda la gente con García a la
cabeza acampara en las afueras de la población, en la finca "La Glorieta", pues
así se expeditaba mejor la marcha hacia el camino de Manzanillo [hacia donde
debían partir a detener una columna enemiga que venía hacia Bayamo desde aquel
pueblo] y el descanso de las tropas; y yo y Donato pasamos al Cuartel de
Céspedes a recibir órdenes.
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