En: Periódico “La Revolución”. Nueva York
24-9-1870, No.199 Archivo Nacional de
Cuba, Fuera de Caja 2.
C. [ciudadano] Director de “La Revolución”.
Muy Sr. mío: espero que Ud. se sirva dar publicidad al hecho que paso a comunicarle, transcribiéndole la adjunta:
Querido amigo:
Hallándome en una casa de la jurisdicción de Jiguaní, punto nombrado “Brito”, curándome la herida que recibí en el brazo izquierdo[1] de la cual estoy hoy completamente restablecido. El 11 de julio pasado fue asaltada la casa por la partida que manda el traidor Lolo Benítez[2] pero avisado yo oportunamente me trasladé a otro lugar poco antes de la ocurrencia.
Burlados los planes del enemigo, desahogó [el traidor] su ira contra unas infelices familias que vivían por esos alrededores, asesinando a Felicita Mora y cinco hijos, el mayor de 8 años; a una anciana de setenta y a 6 niños de esta última. Hechos como el indicado no necesitan comentarios.
Reciba Ud. la expresión de amistad de su afectísimo
Calixto García
Agosto 20 de 1870
C. [ciudadano] Director de “La Revolución”.
Muy Sr. mío: espero que Ud. se sirva dar publicidad al hecho que paso a comunicarle, transcribiéndole la adjunta:
Querido amigo:
Hallándome en una casa de la jurisdicción de Jiguaní, punto nombrado “Brito”, curándome la herida que recibí en el brazo izquierdo[1] de la cual estoy hoy completamente restablecido. El 11 de julio pasado fue asaltada la casa por la partida que manda el traidor Lolo Benítez[2] pero avisado yo oportunamente me trasladé a otro lugar poco antes de la ocurrencia.
Burlados los planes del enemigo, desahogó [el traidor] su ira contra unas infelices familias que vivían por esos alrededores, asesinando a Felicita Mora y cinco hijos, el mayor de 8 años; a una anciana de setenta y a 6 niños de esta última. Hechos como el indicado no necesitan comentarios.
Reciba Ud. la expresión de amistad de su afectísimo
Calixto García
Agosto 20 de 1870
[1] Detallando esta
herida de Calixto, Máximo Gómez le narró al Dr. Félix Figueredo en carta de 6
de junio de 1870: “Una fatalidad amigo
mío, y si te hubieras podido venir con Fulgencio hubieras parecido aquí como un
ángel consolador. Calixto herido en el
antebrazo del brazo izquierdo, en un tiroteo que tuvimos con los soldados el
día último del (...) en la Cruz Alta allí al pie del pueblo, una bala le toco a
él y se le quedó dentro que hasta llegó a abrir la piel, que tu aquí en un
momento se la hubieras sacado o en el acto mismo, pero suponte yo solo y ni
siquiera (...) curioso, tuve que curarlo como pude hasta antes de ayer que
lo mandé para Charco Redondo y allí el
intrépido y bueno del Comandante Durán se la ha extraído” (En: Biblioteca Nacional de Cuba/Morales /t.25/No.
91). El 7 de noviembre de 1870 Máximo
Gómez informó la reincorporación de Calixto a las acciones, aunque su brazo
mantuvo algunas afectaciones.
[2] El traidor
aparece indistintamente nombrado “Lalo” y “Lolo”. El 16 de marzo de 1872 escribió Céspedes en
su diario acerca del “sanguinario Lalo Benítez que tantas víctimas indefensas
ha sacrificado”, pero en su último diario menciona varias veces a “Lolo”
Benítez.
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